Hemos hablado mucho del cohousing pero hace tiempo que no recapitulamos y explicamos lo que es completamente puesto que en la mayoría de nuestros post lo damos por sabido. Sin embargo está bien de vez en cuando echar la mirada atrás, ver su origen y cómo se ha aplicado al caso de Residencial Puerto de la luz.
El cohousing o covivienda es un acuerdo social en el que las personas viven en proximidad unas de otras compartiendo un espacio común.
Se desarrolló por primera vez en Dinamarca y Noruega (es algo europeo de corazón) en los años 60 y se hizo más popular en los EE. UU. cuando Helen y Scott Nearing introdujeron por primera vez la idea de la vivienda compartida a sus vecinos. La idea no era extremadamente novedosa, en China ya existían comunidades que vivían en viviendas comunales desde hacía siglos, los tulou o Fujian Tulou; simplemente se actualizó la fórmula.
Las comunidades de cohousing actuales, como es el caso del Residencial Puerto de la Luz, suelen ser desarrollos residenciales que proporcionan viviendas privadas para grupos de personas que se convierten en socios al adquirir participaciones en forma de una vivienda del residencial. Suelen ofrecer instalaciones compartidas como jardines, salones, cocinas, lavanderías y otras instalaciones específicas, además de espacios recreativos como bibliotecas y gimnasios.
Un lugar como el caso de Residencial Puerto de la Luz está pensado para personas que prefieren un tipo de vida, que ven que a partir de sus 50 o 55 años no quieren ocuparse de espacios como apartamentos o casas donde tengan que estar pendientes de todo sino aprovechar mejor el tiempo. La idea de la comunidad residencial está pensada para eso puesto que el socio que aprovecha la vivienda tiene todo lo que necesita para llevar una vida cómoda sabiendo que los aspectos de mantenimiento y del día a día estarán más que cubiertas.
Es una forma de disfrutar de la vida en comunidad bajo tus propias normas, con tus objetivos y sabiendo que es una forma, sobre todo, de ganar en tiempo de calidad y dedicarlo a nuestros proyectos y aficiones.
En definitiva, eso es vivir en un cohousing como Residencial Puerto de la Luz: ganar en calidad de vida.